lunes, 1 de septiembre de 2025

Picos Tristaina y Punta de Peyreguils. Circular desde Parking Creussans en Ordino-Arcalís

Salida: Parking de Creussans (Ordino Arcalís, Andorra)
Distancia: 10.6 km
Duración: 7:00 h (sin paradas)
Subidas Acumuladas: 990 m
Altura Inicial: 2260 m
Altura Máxima: 2878 m
Fecha de realización: 30/06/2025
Dificultad: moderada
Track de la ruta




Itinerario: Parking de Creussans (Arcalís) – Coma del Forat – Estany Primer – Vistas del Estany el Mig – Vistas sobre el Estany de Més Amunt – Ladera sur del Trstaina – Arista del Tristaina – Pic de Tristaina – Arista occidental del Tristaina – Port de Tristaina – Rodeo del Circo de Tristaina – Vistas sobre el Estany de Més Amunt – Collado (2.642 m) – Punta de Peyreguils (Reloj solar) – Estación superior telesilla – Estany del Mig – Orri de la Coma del Forat – Parking e Creussans (Arcalís).

El circo del Tristaina está situado al norte de Andorra en el límite con Francia. Sus bordes occidental, septentrional y oriental forman parte de la frontera y su pico más alto es el esbelto Tristaina visible desde muchos puntos de Andorra. Con menos desnivel y distancia que la anterior, esta ruta nos va a permitir recorrer el magnífico circo en cuyo fondo se asientan los preciosos lagos o estanys del mismo nombre. Después de rodear los tres lagos subiremos al Tristaina por la su cara sur, lo bajaremos por su arista occidental y rodearemos por arriba el circo para alcanzar la Punta de Peyreguils donde han colocado un enorme y turístico reloj de sol al que se puede llegar fácilmente mediante una telesilla desde el aparcamiento. Nosotros bajaremos por caminos.


Debemos llegar pronto al aparcamiento porque a partir de las 8:30 se cierra el acceso a la estación de esquí para vehículos privados y el único medio de subir es o bien en la telecabina desde l’Hortell o caminando por la carretera. Dejamos el coche en el amplio aparcamiento que da servicio a la estación de esquí y, aunque la senda balizada empieza un kilómetro más atrás en la carretera de acceso, comenzamos la caminata siguiendo la sendilla que va pegada a la Coma del Forat en el fondo del cercano valle (E). Interceptamos la marcada senda que remonta (N) la empinada ladera hasta dar con la amplia cubeta donde se encuentran los Estanys de Tristaina.

Desde la Coma del Forat echamos la vista atrás. Instalaciones de la estación de esquí de Arcalís.

Bajamos unos metros hasta el Estany Primer que rodeamos por la derecha para seguir una marcada senda obviando la que va más abajo pegada al lago. La senda, señalizada con puntos amarillos como todo el resto de la ruta, va subiendo poco a poco ofreciéndonos por el camino unas vistas extraordinarias sobre los tres lagos: primero dejamos atrás el Estany Primer, después pasamos sobre el Estany del Mig y finalmente, cuando la senda da un respiro en la base del Tristaina, nos situamos sobre el Estany de Més Amunt. En esta amplia terraza se encuentran algunas pequeñas lagunas pero la vista de la inclinada ladera sur del Tristaina por donde vamos a subir impone desde abajo.

Llegando al Estany Primer. Al fondo vemos la Serra Tristaina que cierra el circo.

Continuación de la vista anterior. A la izda se ve la Punta de Peyreguils y su gran reloj de sol.

Al doblar un hombro vemos el Pic de Tristaina. A la izda el Estany de Més Amunt.

Echamos la vista atrás y nos encontramos con el Estany del Mig. Los picos que se ven al fondo los nombro en otras fotos más abajo.

Pequeño tramo de descanso antes de la dura subida por la cara sur del Tristaina.

Desde esa misma posición vemos el Estany de Més Amunt y a la izda la Punta de Peyreguils. Después de bajar del Tristaina seguiremos una senda a media altura hacia el Peyreguils.

Aquí la senda se divide en dos: a la derecha (E) va una que entra en Francia por el Port de l’Abeille, la otra, la nuestra, remonta la herbosa ladera sur. Al principio la inclinación no es demasiada, después aumenta y la descarnada senda de arcilla y gravilla se hace dura a la vez que se retuerce cogiendo altura rápidamente. Llegamos al roquedo donde hacemos uso de las manos para trepar fácilmente pero con cuidado; la piedra está bien asentada y los agarres son buenos. Después de unas pequeñas trepadas para superar las correspondientes terrazas alcanzamos la arista que nos abre el horizonte norte hacia la zona francesa. Destaca el Étang Fourcat (Lago Fourcat) a nuestros pies.

Al poco de comenzar la subida echamos la vista atrás para ver dos de los tres Estanys de Tristaina.

Un poco más arriba saco esta foto hacia el este. A los picos de la Font Blanca y de L'Estanyó subiremos los próximos días.

Comienza la roca y las pequeñas trepadas se suceden de terraza en terraza.

Aquí se aprecia mejor la inclinación y el tipo de roca.

Vista hacia abajo. En esta foto no se ve el anterior tramo de roca.

En la arista encontramos este gran hito que nos indica la dirección de la cumbre. Este corto tramo hasta la cima es fácil de caminar.

Un gran hito y los omnipresentes puntos amarillos nos señalan hacia la cima. La sencilla arista nos deja pronto en la cima del Tristaina coronada con un hito y un alargado listón metálico característico de las cimas andorranas con el nombre del pico y su altura perforados en él. Las vistas son extraordinarias; dejo algunas fotos ilustrativas.

Llegando a la cima.

Típica señalización de los montes andorranos. Al norte, en la zona francesa, vemos el Étang (lago) Fourcat.

Mirando al norte (Francia) desde el Tistaina.

Vista oeste desde el Tristaina.

Mirando al suroeste.

Hacia el noreste (Francia) vemos el Étang de la Goueille.

Después de deleitarnos un buen rato con las vistas emprendemos el descenso por la arista occidental, señalizada también con puntos amarillos. El primer tramo de la arista es por el que subimos. A partir de aquí habrá que extremar las precauciones pues la arista se afila con algún paso aéreo, además habrá que destrepar por algunas cortas canales bastante verticales pero sin ninguna complicación técnica. El último canal que nos permite descender un resalte vertical nos deja en el Port de Tristaina.

Bajando por la arista occidental del Tristaina.

Algunos peñascos se bajan por cortas canales.

Vista hacia atrás de uno de los resaltes por los que hemos bajado.

Nos despedimos de momento de la frontera francesa y bajamos (S) unos metros por la inclinada canal de hierba para reencontrar los puntos amarillos en un pedrero situado por debajo. Vamos a rodear el Circo de Tristaina a media altura siguiendo las marcas. Será un continuo sube baja atravesando algunos pedreros de grandes y pequeñas piedras, incluso de grandes bloques, también habrá que cruzar un crestón rocoso por una pequeña y fácil vira siempre sobre el Estany de Més Amunt. En un rellano de la inclinada ladera, justo sobre el extremo sur de ese lago, la senda y las marcas amarillas se dividen en dos. La de la izquierda bajan a los lagos donde la senda enlazaría con el camino de subida, cogemos la que sube a la derecha pues queremos visitar el enorme y turístico reloj de sol.

Pic Tristaina y arista occidental por la que hemos bajado.

En sentido contrario tenemos los tres Estanys de Tristaina. Foto tomada mientras rodeamos el circo a media altura.

Rodeando el gran circo del Tristaina. Como se ve el terreno es mixto pero hay buena senda, hitos y los omnipresentes puntos amarillos.

Subiremos (O) unos 120 metros hasta un collado (2.636 m) en la cumbrera de la Serra de Tristaina de nuevo en el límite con Francia. Otro circo glaciar que vierte al sur desde el Pic de L’Etang Fourcat se nos abre a la vista en la zona francesa. 

En el collado de 2636 m nos situamos de nuevo en la frontera con Francia. El pico que vemos es el Pla de l'Estany (ver más abajo).

Desde ese mismo collado continuamos con la panorámica hasta la Pica d'Estats.

Desde ese mismo collado continuamos hasta el cierre del circo por el Pic de L'Etang Fourcat.


Nuestra senda pintada con puntos amarillos nos lleva ahora al sur faldeando en suave ascenso la arista norte de la Punta de Peyreguils. Una brecha nos permite continuar por el otro lado bajando unos metros para después subir al pico donde han instalado un enorme reloj de sol. Su circunferencia de 25 metros de diámetro, colgada sobre la montaña, se puede rodear por el pasillo de 1’5 metros de anchura. Su gnomon tiene una longitud de 27 metros y está inclinado 42.55º (que es la latitud del lugar), todo el conjunto pesa 32 toneladas. Un guía nos da unas pequeñas explicaciones acerca de su construcción y de las vistas que tenemos alrededor. Paramos a comer.

Llegando a la Punta de Peyreguils con su enorme reloj de sol.

Reloj de sol sobre la Punta de Peyreguils.

Desde la Punta de Peyreguils miramos hacia el suroeste.

Continuación de la panorámica anterior.

Vista hacia el oeste desde la Punta de Peyreguils.

El cercano circo se cierra al norte en el Pic de L'Étang Fourcat.

Ahora miramos al Tristaina con el Estany de Més Amunt a sus pies.

Vista hacia el este desde la Punta de Peyreguils.

Siguiendo un camino ancho bajamos por ladera opuesta hasta la cercana estación superior de las telesillas que vienen desde el Parking de Creussans. Aquí hay unos paneles donde se señalan los montes que se ven. La pista da un giro a la izquierda y baja por terrero andorrano hacia el pequeño Estany de Creussans. Bastante antes de llegar a él abandonamos la pista y seguimos una senda que baja entre rododendros hacia el Estany del Mig (el lago intermedio de los de Tristaina). Antes de llegar a la orilla del lago cogemos otra senda (que es la que abandonamos para subir al Peyreguils) que sube unos metros para rodear un espolón rocoso.

Mientras bajamos obtenemos esta preciosa vista del Tristaina con los estanys de Més Amunt y del Mig.

Obviando los lagos nos dirigimos al sur para superar un cercano hombro.

A punto de pasar sobre el hombro los rododendros tapizan la ladera.

Una vez en el Parking de Creussans visitamos el cercano Orri de la Coma del Forat.

Al otro lado el camino de mejor traza nos deja rápidamente en el Parking de Creussans (Ordino Alcalí). Aprovechamos que vamos bien de tiempo para hacer una visita etnológica al Orri y Cabanes de la Coma del Forat. Se trata de la reconstrucción de mediados del siglo XX que recrea las cabañas y el modo de vida de los pastores de la zona. Un Orri es una construcción típica de los Pirineos por donde se conducían las ovejas para ordeñarlas.

Lorenzo Sánchez Velázquez